Greencities 2019 debate las principales estrategias para alcanzar una movilidad conectada y sostenible
Greencities, Foro de Inteligencia y Sostenibilidad Urbana, que está teniendo lugar desde ayer en Málaga, ha desarrollado dentro del ‘Foro Tic & Sostenibilidad’ un panel de expertos con representantes de instituciones de diversa índole, las principales estrategias para alcanzar una movilidad integrada, conectada y sostenible.
Juan Marín, director de ciudades -España y Portugal de Kapsch TrafficCom AG, moderador de la mesa, comenzó reflexionando sobre la importancia de la tecnología en cuestiones de movilidad, incidiendo en que “hay distintos tipos de tendencias en movilidad y la tecnología e innovación es el eje integrador”.
Elvira Maeso, concejala delegada del Área de Movilidad del Ayuntamiento de Málaga, recalcó que el objetivo actual es “construir un modelo que represente con la mayor fidelidad posible la realidad de la movilidad en la ciudad”. Para ello, el Plan Especial de Movilidad Urbana Sostenible de Málaga pretende aumentar la movilidad peatonal y en transporte público, que “ha cerrado el año 2018 con un récord histórico de 47.5 millones de viajeros transportados” y acrecentar la movilidad en bicicleta a través de medidas como “la ampliación del sistema público de bicicletas o la creación de plataformas de estacionamiento”.
Mario Muñoz-Atanet, director general de Movilidad de la Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, afirmó que, en los últimos 60 años, “se ha dado un fuerte proceso de urbanización en Andalucía”. A pesar de esto, el proceso evolutivo de la movilidad en las ciudades “se ha basado en parámetros no sostenibles” que han desembocado en un “escenario actual de la movilidad que presenta una fuerte dispersión urbana”. Por ello, el nuevo paradigma “apuesta por la movilidad compartida a través de plataformas de uso colaborativo y por movilidad autónoma y conectada a través de la tecnología CAV (Connected and Autonomous Vehicle)”, donde las administraciones favorezcan un “entorno adaptado y una adecuada planificación para su implementación”.
Por su parte, Pablo Isusi, subdirector de Gestión de la Movilidad del Ayuntamiento de Bilbao, hizo especial hincapié en la idea de que la movilidad “es un derecho universal y por ello hay que integrar un servicio sostenible en el tiempo para todas las personas”. Bajo la premisa de que “ningún vehículo es autónomo si no es conectado”, mostró dos casos de servicios de sistemas operativos que se aplican a la movilidad urbana: el C-Mobile, que integra un “mapa de huecos libre para parking, así como devuelve al cliente el tiempo que no utiliza para otro momento”; y GLOSA, el “primer paso en la movilidad urbana cuyo objetivo está en la comunicación punto a punto en 5G”.
Adrián García, regidor de Hacienda e Innovación del Ayuntamiento de Palma de Mallorca, abordó el reto de cómo la movilidad cambia a gran velocidad de tal forma que ahora “el 80 por ciento de los vehículos actuales en las ciudades son prescindibles”. Destacó como principales riesgos la aparición de nuevas tecnologías que “crean nuevas soluciones, pero también nuevas necesidades”, la gestión de las administraciones que “en ocasiones ofrecen una visión a largo plazo que no generan recursos con vida útil” y la presión comercial a la que se ven sometidas las empresas tecnológicas que “buscan solo estrategias puntuales y rápidas”.
Por último, Alberto Serrano, director del Centro de Gestión del Tráfico del Suroeste, fijó el principal objetivo de la DGT en “la reducción de la accidentalidad hasta llegar a una ‘Visión Zero’: fallecidos, heridos, congestión y emisiones”. Para ello, han desarrollado un ‘Plan Estratégico 2011-2020’ que “introduce la movilidad autónoma y conectada y tiene el objetivo de reducir al 50 por ciento los fallecidos”. Destacó que el modelo de conectividad actual es la DGT 3.0 y su plataforma de vehículo conectado, ya que desde la institución destacan que “el 67 por ciento de los conductores usan aplicaciones de movilidad en sus respectivos desplazamientos”.
Juan Marín concluyó recalcando la importancia de la colaboración entre instituciones y administraciones en todos los niveles, así como la visión global de las soluciones y la tecnología e innovación para el desarrollo de las ciudades del futuro con una movilidad integrada, conectada y sostenible.